La declaración de la Administración de los Estados Unidos acerca del traslado de su Embajada en Tel Aviv a Jerusalén en el mes de mayo revela que los Estados Unidos insisten en socavar las bases de la paz al desconocer el derecho internacional, las resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas sobre Jerusalén y los parámetros establecidos de las Naciones Unidas.

Lamentablemente, los Estados Unidos demuestran que no oyen, y lo que es peor, que no les importa la voz de la conciencia de la comunidad internacional, tal como fue reflejada en el Comunicado Final de la Cumbre Extraordinaria de la OCI en Estambul y posteriormente, en la resolución de la Asamblea General de las Naciones Unidas.

En respuesta a esta decisión tan preocupante de los Estados Unidos, Turquía mantendrá sus esfuerzos, junto con la gran mayoría de la comunidad internacional, para proteger los derechos legítimos del pueblo palestino.